Los análisis de agua de la totalidad de las sedes arrojaron como resultado "No potable"
Desde ADUNLu nuestros representantes paritarios en la Comisión de Condiciones y Ambiente de Trabajo (CCyAT-NP) establecida en nuestro CCT, han solicitado durante el 2022 se realicen los análisis de agua para consumo humano que luego de la pandemia no se volvieron a hacer.
Asimismo, venimos reclamando se cumplan con otras demandas de seguridad e higiene las cuales están en curso.
Durante el año pasado la UNLu realizó análisis de agua de distintos puntos de consumo en todas las sedes de la Universidad tal como lo establece la legislación vigente. Estos ensayos, según la ley N° 19.587 de Seguridad e Higiene en el Trabajo y su decreto reglamentario, deben realizarse semestralmente para los parámetros microbiológicos y anualmente para los físico químicos. En la Universidad Nacional de Luján no se realizaban desde el año 2020.
Las muestras tomadas para el análisis corresponden al agua envasada (dispenser) y agua de la red de la totalidad de las sedes de la UNLu. Con excepción del agua envasada, en el resto de los casos los resultados establecen que existen parámetros físico químicos y microbiológicos por fuera de la definición estándar de "agua potable". Cabe mencionar que se evalúan diferentes parámetros entre los que se pueden mencionar: contenido de nitratos, de nitritos, de arsénico, de plomo, presencia de coliformes, Escherichia coli, Pseudomonas, entre otros.
En la mayoría de los casos, los valores de concentración de Arsénico y de nitratos, además de la presencia de coliformes están por fuera de los rangos establecidos. También existen muestras con presencia de Escherichia coli un fuerte indicador de contaminación con materia fecal. Hay que destacar que si bien en la zona existen niveles altos de contenido de Arsénico en agua de red y que muchas personas consumen este agua, su consumo prolongado cuando existe dosis alta de este metaloide sumado a la susceptibilidad de las personas, puede derivar en el desarrollo de Hidroarsenicismo Crónico Regional Endémico (HACRE), una enfermedad crónica.
Las recomendaciones que realizan los especialistas es que se restrinja el consumo humano, se realice una limpieza de los tanques y se coloquen dispenser o filtros de osmosis inversa.
Al momento no hemos recibido ninguna información acerca de la ejecución de alguna de estas recomendaciones. En los hechos, nos encontramos con que no hay ningún tipo de señalización acerca de la potabilidad del agua de canillas y tampoco existe en todos los espacios de trabajo o de estudio, dispenser con agua envasada.
Hacemos públicos estos resultados, entendiendo que es nuestra responsabilidad como entidad gremial la defensa irrestricta de las condiciones de trabajo de lxs trabajadorxs docentes como así también ser solidarixs con el resto de lxs trabajadorxs que transitan nuestra Universidad, tanto trabajadorxs no docentes como estudiantes.
Exigimos a las autoridades de la UNLu que señalicen de manera urgente los puntos de consumo habituales, disponga de agua potable en cada puesto de trabajo y estudio, comunique el plan de acción para garantizar agua potable en la totalidad de las sedes y centros regionales.
Alentamos también al conjunto de lxs docentes a exigir vía Secretaria Administrativa de su departamento se garantice acceso al agua potable en su lugar de trabajo (oficina, laboratorio, pasillo de aulas, gimnasio, campo, etc.) como así también informar a los representantes gremiales en la Comisión de Condiciones y Ambiente de Trabajo sobre la situación.
Representantes gremiales en la Comisión de Condiciones y Ambiente de Trabajo
Contacto: ccyat.adunlu@gmail.com
En el siguiente link están los informes y resultados de los análisis para quienes quieran verlos.