Desde ADUNLu compartimos el repudio emitido por los organismos de DDHH, organizaciones sociales, sindicales y políticas por el asesinato de Susana Beatriz Montoya, compañera de Ricardo Fermin Albareda, militante del ERP, que permanece desaparecido desde que las fuerzas represivas lo secuestraron en 1979 en Córdoba, y madre de un compañero de H.I.J.O.S.
Junto al cuerpo de Susana se encontró un mensaje que nos retrotrae a los crímenes perpetrados por las AAA, donde aseguran que matarían a sus hijos. Es de señalar que su hijo, Fernando Albareda, ha sido reiteradamente amenazado con mensajes de corte fascista y con proyectiles.
Como hemos sostenido en reiteradas ocasiones, desde que asumió el actual gobierno de Milei-Villaruel, este asesinato se enmarca en las constantes provocaciones, el negacionismo y la reivindicación de la última dictadura que vienen realizando sistemáticamente distintos miembros del gobierno. Por lo tanto, hacemos responsables de este crimen al gobierno nacional y a quienes acompañan sus políticas de odio.
¡No perdonamos, no nos reconciliamos!
¡Fue Genocidio!
¡Son 30 Mil!